1- Es ese tejido dérmico, la piel que te cubre el cuerpo, también considerado como el órgano más grande del ser humano.

2- La ropa, esa indumentaria que el hombre uso para tantos fines como fuese posible, cubrirse, taparse, diferenciarse, establecerse ante los demás, clasificarse ante otros individuos.

3- La casa, la vivienda, una traducción mas sincera y diáfana de lo que esa caverna o cueva significa para el hombre de hoy, el lugar donde vives.

Existen profesionales de varias ramas del saber que definen también una cuarta piel y se la atribuyen al hombre como el tejido urbano, el entorno inmediato, ese marco que nos rodea, el barrio, el vecindario, esos lugares que mas visitas, donde el hombre pulula y se hace pertenecer.

A ninguno de los que defienden estas teorías y nos las hacen ver como afirmaciones son personas que muestren equivocación, no, en lo mas mínimo, mas bien nos hacen un gran favor al establecer de manera profesional este punto de vista de que el hombre, el individuo, posee por lo menos 3 pieles que lo hacen ser lo que es hoy ante los demás y por sobretodo a través del tiempo, esto da un mensaje de evolución, de desarrollo, de establecimiento, da hacerse sentir y por lo menos yo, en lo particular, invito a hacerse participe, a conocer esas pieles y defender este legado histórico.