A veces, en el discurrir por la vida, pasamos balance mental de los hechos pasados y resurgen del sepulcro infiel de nuestra memoria, historias que contar podemos, hechos y personajes; hoy que el Sol no se define entre “dejarse ver o dejar de calentarnos” para dar paso a una llovizna que nos traza una raya imaginaria entre quedarse en el calor del hogar o salir a recrear la vagancia que todos llevamos dentro. He recordado a un amigo en contumacia (porque no está presente y como si fuera un juicio) que siempre tiene una nota alegre para los entresijos de la vida. Nos mantenemos como la Penélope de Serrat, esperando y preguntando cuando vuelve para estar con los suyos un aliado de caminatas, deportes, chistes y por qué no, de esos tragos que se planifican cortos y como elástico se alargan más allá del largo de nuestros brazos, pausando los minutos que pasaron…
Lo asocio con el domingo, día libre para salir a ningún sitio y siempre nos juntamos en los mismos lugares. Sócrates Severino Comprés hoy que debe estar en las Islas Providenciales, expectante en las autopistas del Internet, junto a Edmundo López Sánchez, Erasmo Vilorio, Rafael Alvarez, Jhonatan Matos, El Matador y JACA TCI que produce vida para criollos y extranjeros.

Sé que el cordón umbilical de mi página acuarelatv nos unirá para celebrar por un instante como si nos alimentáramos de la sabia de la vida.