Antes de llegar Colon a la isla, los aborígenes colaban oro aluvional en Pueblo Viejo. Pueblo Viejo correspondía al nitaíno indio Cotoi. Los aborígenes al ver el interés de los españoles por el oro le dijeron que ellos sabían donde había mas y los trajeron a lo que es hoy el yacimiento minero a cielo abierto por estos entornos y la mina de oro en producción más grande de Barrick Pueblo Viejo Cotuí.

Los españoles sometieron a los tainos a trabajos muy duros, sacando oro, que los extinguieron. Los frailes iniciaron la importación de negros esclavos para hacer el trabajo que hacían los aborígenes. El bachiller Álvaro de Castro, Deán de la iglesia católica y el primer obispado de América del 1510 propone al obispo Funleal hacer una compañía minera en Cotuí.

Álvaro de Castro que su investidura le permitía hacer misa construyó la iglesia de la Villa de Cotuí en honor a Corpus Cristi trayendo para dicha celebración junto con los negros del Congo de África la Cofradía de la Hermandad del Espíritu Santo. Juega a los moros y cristianos dejándonos la tradición carnavalesca, construye la primera carretera Cibao Sur y se habla en archivo de India de la casa de acuñar moneda en Cotuí.

Nuestro pueblo Cotuí, cuenta con esta tradición ininterrumpida desde el 1512 hasta la fecha y es considerado por la UNESCO patrimonio oral inédito de la humanidad.